En los últimos tiempos han salido varios estudios sobre la necesidad del networking, de cómo se gestiona, cómo se crea desde la persona, desde el profesional, los usos, las estrategias, su mantenimiento…
Podríamos ver, cada uno de nosotros de forma retrospectiva, cómo es nuestra actividad, qué contactos tenemos, qué usos le damos, para qué la queremos.
También nos podemos plantear qué es el networking, si es interno, de cara a nuestros compañeros de trabajo, de cara a clientes, o al sector en el que te desenvuelve. Si está basado en el interés o en la amistad.
La pregunta es ¿cuál es nuestra red? ¿y cómo la voy a utilizar a futuro? Realmente nos movemos en entornos muy pequeños, por sectores todos nos conocemos, sabemos quién es quién, y el networking en muchas ocasiones no es en función de la realidad laboral, sino de quiénes son los jefes, los que mandan, los que deciden.
Ahora bien, me lo quiero llevar a mi ámbito, o al ámbito de este blog, que toca aspectos digitales.
Si ponemos los puntos encima de la mesa, trataríamos aspectos como:
Siempre se habla, y parece que la transformación digital va por ahí, de ser omnicanal… pero todas las estrategias son puramente de cara al usuario, al B2C. Cómo conseguir ventas, fidelización, nuevos clientes… En los últimos años, la implantación de CRMs, ha servido para poder establecer también una nueva dimensión del B2B, de cara a la relación entre empresas, proveedores y clientes, gestionadas desde los departamentos de Trade Marketing. Hay que poner en marcha el capital relacional, superando las barreras existentes (que se demuestran en el “Estudio sobre usos y hábitos de networking” de Grupo BLC), como el no tengo tiempo, no forma parte de mi manera de ser, o siento que estoy pidiendo favores.
El medio más usado para hacerse ver y mostrarse es Linkedin, usado sobre todo para crear nuevos contactos, mantener activa mi red o incrementar mi visibilidad. Pero aun tendiendo a mano las nuevas tecnologías, redes sociales etc, todavía prima la relación personal, los afterworks como ejemplo, los eventos, convenciones y congresos.
Necesitamos como profesionales crear, cultivar y mejorar nuestra red de contactos, no para pedir favores, sino como actividad pura de nuestra trayectoria profesional, hacer el trabajo de una manera más relacional y natural. Efectivamente la tecnología hará que las relaciones cambien (cada vez se teletrabaja más y crece el número de autónomos). En Estados Unidos, el 40% de las empresas de nueva creación son autónomos, esto es, trabajan desde casa, mientras que en muchas empresas el networking es algo negativo porque lo ven como una amenaza de pérdida de talento. Difícil coctel al que la empresa se deberá de ir adaptando… ya que las nuevas generaciones entienden de manera completamente distintas las relaciones profesionales, dentro de la empresa, y hacia fuera.
Si crees que podemos colaborar y hacernos más grandes juntos, queremos charlar contigo.